Las dificultades del habla pueden revestir múltiples formas de diferentes grados de gravedad. Desde la incapacidad para generar palabras a la ausencia de entonación. En el mercado, existen diferentes aplicaciones para aliviar estos padecimientos, aunque la mayoría están basados en generar sonidos mediante la conversión de texto a voz e incluso existen aplicaciones que permiten generar y expresar frases de manera muy rápida en intuitiva mediante imágenes que se seleccionan y combinan en la pantalla de un teléfono o tableta.
Las herramientas que se han visto para este análisis son fundamentalmente de origen norteamericano y, aunque indican que valen para múltiples idiomas están centradas en la lengua inglesa.
Impulse es una app desarrollada por Samsung dentro de su programa “Tecnología con propósito” para solucionar trastornos concretos del habla a personas que los padecen.
Ejemplos de estos trastornos pueden ser tartamudez, alteraciones en la velocidad en el habla, ritmo en el habla o entonación. Las causas pueden ser diversas como congénitas, enfermedades degenerativas o provocadas por incidentes como puede ser un ictus. En todo caso, la dificultad del habla proviene de una descoordinación de lo que el cerebro indica que quiere decir y la forma de decirlo.
Por lo tanto, Impulse no se dirige a personas con incapacidad de hablar o de crear frases sino a personas con una dificultad en la exposición.
El método utilizado para mejorar esta situación es mediante impulsos/vibraciones que el paciente recibe a través de un SmartWatch o del teléfono. Impulse analiza el lenguaje natural y transforma las sílabas en vibraciones rítmicas.
Se basa en una terapia del ritmo que pretende crear un ritmo subconsciente y, en este caso, lo facilita mediante los impulsos generados por el SmartWatch.
De esta manera, la persona usuaria puede realizar ejercicios del habla en el momento y ubicación que desee, sin depender de asistir a una consulta con su logopeda.
Además de su utilización como ejercicio terapéutico, al basarse en vibraciones del reloj o del teléfono, la persona usuaria lo puede utilizar en conversaciones reales o incluso discursos. Esta posibilidad ayuda a mejorar la comunicación real de la persona usuaria con su entorno.